Descripción
Con una poesía fresca y honesta, La esfera intacta nos lleva a un viaje, a una exploración del ser desde una capacidad intuitiva, pero también desde un erotismo imbuido tanto en lo corpóreo femenino como en una geografía volcánica, atlántica e insular. En diálogo con un tú, que, al fin, es un tú y un yo al mismo tiempo, la autora emprende un camino por tres esferas: la del presagio-amor, la de la pérdida-dolor y la de la exploración de un espacio propio “la isla de las islas, el lugar de los lugares”. Este tránsito, aunque interno, pasa por cráteres, magma y salinas, por la ciudad de Alejandría, por el mar Báltico y el Caribe, dándose ahí encuentros con personajes tan variopintos como un perro azul, unas escapistas, un salinero, los interestelares o una lectora persa, por lo que el poemario puede también leerse como una historia. Una historia que va de un principio presagiado a un final que sigue en búsqueda de esa esfera interior intacta y permanente.
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